El Papa en Perú a los jóvenes: El corazón no se puede “photoshopear”
(ACI).- En sus palabras previas al rezo del Ángelus en Lima, Perú, el Papa Francisco advirtió a los jóvenes que “el corazón no se puede ‘photoshopear’” ni maquillar, y les recordó que Jesús “te ama así como eres”.
Sobre el mediodía, hora local, el Santo Padre dirigió su mensaje desde el balcón del Palacio Arzobispal a los miles de jóvenes y fieles reunidos en la Plaza Mayor de la capital peruana.
“Queridos amigos, el Señor los mira con esperanza, nunca se desanima de nosotros”, aseguró Francisco.
“Quizás nosotros sí podemos desanimarnos de nosotros mismos o de los demás. Sé que es muy lindo ver las fotos arregladas digitalmente, pero eso solo sirve para las fotos, no podemos hacerle ‘photoshop’ a los demás, a la realidad, ni a nosotros”.
El Santo Padre precisó que “los filtros de colores y la alta definición solo van bien en los videos, pero nunca podemos aplicárselos a los amigos”.
“Hay fotos que son muy lindas, pero están todas trucadas y déjenme decirles que el corazón no se puede ‘photoshopear’, porque ahí es donde se juega el amor verdadero, ahí se juega la felicidad”.
El Papa alentó a los jóvenes a mostrarse “delante de Jesús como sos, para que Él te pueda ayudar a progresar en la vida”.
“Cuando Jesús nos mira, no piensa en lo perfecto que somos, sino en todo el amor que tenemos en el corazón para brindar y servir a los demás. Para Él eso es lo importante, eso es lo más grande”.
Recordando el ejemplo “de los santos que desde el cielo nos acompañan”, alentó a los jóvenes a acudir “a ellos, recen y no se cansen de pedir su intercesión”.
“Esos santos de ayer pero también de hoy: esta tierra tiene muchos, porque es una tierra ‘ensantada’”.
“Jesús cuenta contigo como lo hizo hace mucho tiempo con Santa Rosa de Lima, Santo Toribio, San Juan Macías, San Francisco Solano y tantos otros”, dijo.
El Papa dijo a los jóvenes que si en algún momento se desaniman tomen “la Biblia y acordarse y leer ahí los amigos que Jesús eligió, que Dios eligió: Moisés era tartamudo; Abraham, un anciano; Jeremías era muy joven; Zaqueo, un petiso; los discípulos, cuando Jesús les decía que tenían que rezar, se dormían; la Magdalena, una pecadora pública; Pablo, un perseguidor de cristianos; y Pedro, lo negó. Después lo hizo Papa, pero lo negó… y así podríamos seguir esta lista”.
“Jesús te quiere como sos, así como quiso a estos sus amigos, con sus defectos, con ganas de corregirse, pero así como eran”.
“Cuando Jesús nos mira, no piensa en lo perfecto sino en todo el amor que tenemos en el corazón para brindar y para seguirlo a Él, para Él eso es lo importante, eso es lo más grande ¿Cuánto amor tengo yo en mi corazón?”.
“Esas respuestas quiero que las hagamos también a nuestra Madre, Madre Querida Virgen María, mirá el amor que tengo en el corazón, es poco, es mucho, no sé si es amor, y tengan seguro que ella los acompañará en todos los momentos de la vida”, dijo.
El Santo Padre exhortó luego a los jóvenes a no desanimarse, sino que “vayan adelante, todos juntos, la vida la pena vivirla con la frente alta. Que Dios los bendiga”.
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