San Lucas: una vida de entrega a la obra de la evangelización que no tiene miedo a la muerte
Os presentamos un programa más del Padre Valentín con el que estamos viendo la vida y el contexto histórico donde se mueven diferentes personajes que aparecen en la Biblia, todo, de una forma amena y muy entendible por todos. En este episodio seguiremos hablando sobre la figura de San Lucas donde el Padre Valentín nos explica que este evangelista no sólo es autor del evangelio sino que es autor de dos volúmenes. “Digamos que el Evangelio de San Lucas tiene una segunda parte que son los Hechos de los Apóstoles. Si el evangelio nos narra la vida de Jesús, los Hechos de los Apóstoles nos narra la vida de la Iglesia primitiva”, resalta. Como podemos leer en el prólogo de los propios Hechos, el autor es Lucas.
Pero, ¿quién fue San Lucas? En primer lugar, el origen del nombre, es griego por lo tanto San Lucas no fue judío al menos étnicamente. Lo que se puede conocer de él es que fue compañero de viaje de San Pablo porque en los Hechos de los Apóstoles cuando uno lo lee con atención descubre, que gran parte del libro está narrado en tercera persona. “Por ejemplo cuando San Pablo entra en una ciudad y predicó tal discurso. Sin embargo, sobretodo en el capítulo 16, tenemos un montón de secciones en los Hechos escritas en primera persona del plural”, comenta el Padre. Por lo tanto, el propio San Lucas es testigo en primera persona de gran parte de los eventos narrados en el libro de los Hechos de la iglesia naciente.
Había un escritor cristiano de los primeros siglos, tertuliano, y él solía decir que el evangelio de San Lucas era una digestión de la teología de San Pablo. De la misma forma, que San Marcos fue secretario de San Pedro, San Lucas fue secretario de San Pablo y de hecho San Pablo le encargó algunas de las misiones más delicadas. “Cuando San Pablo reunía fuertes sumas de dinero entre las comunidades más ricas para ayudar a los cristianos más pobres, encomendaba siempre a San Lucas la gestión de ese patrimonio”. Conocemos también por los escritores cristianos de los primeros siglos que su profesión era físico. De tal forma, que siempre se le ha considerado médico. Se entregó por completo a la obra de la evangelización, hasta tal punto que no tiene miedo de perder la vida.
¡No te pierdas el final del programa completo con el que aprenderás sobre esta interesante figura!
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