Conventos 4. Concepcionistas Franciscanas

Casi 700 monasterios hay en España, cada uno de ellos tiene una cultura, una historia, una vida intrínseca en sus muros que hay que contar. Conventos es un formato de entrevistas a las personas que han decidido que su vida debe estar dentro de un convento para dedicarse a eso que llaman Vida Contemplativa.

Increíbles historias de gran valor humano. Cómo es su rutina diaria, de qué viven, qué comen, qué cocinan, dónde duermen, como se divierten, en definitiva como es su vida. Descubriremos el torno, el locutorio, la reja y qué sentido tienen, para cambiar la imagen sesgada, denostada y diferente que se tiene de la Vida Contemplativa. Una producción de “Confía Producciones y Comunicación” en la que ha colaborado, con su financiación, el Instituto Pontificio Claune, ordenada a prestar ayuda a los claustros necesitados, y a la promoción de la vida contemplativa.

El programa de hoy está realizado en Valladolid en el monasterio de la Concepción de concepcionistas franciscanas. Esta orden fundada por Santa Beatriz y el monasterio es del año 1518. Al comienzo de la entrevista podemos ver a Sor Nuria en la celda, en la habitación que era del uso de la madre Sor María Ángeles Sorazu que es una de las hermanas más destacadas de la orden.

Concretamente ella murió en esta celda y también vivió grandes momentos de su vida. Conservan la celda como una auténtica reliquia. Ella nació en Zumaya en Guipúzcoa y de forma providencial llegó a este monasterio como una chica normal. “A los 19 años tiene un encuentro muy fuerte con el Señor y empieza a hacer su proceso vocacional normal como el de toda joven con sus peculiaridades.

Ingresa en nuestro monasterio en agosto de 1891. Las hermanan ven enseguida mucha esperanza en ella y realmente Dios hizo una obra grande porque a partir de su entrada empezaron a entrar otras hermanas más, y al poco tiempo cuando tiene la edad permitida es abadesa del monasterio y ayuda y atiende mucho espiritualmente a las hermanas”, explica Sor Nuria. Tiene una gran influencia incluso en el exterior, gente que la conocía y que se acercaba al monasterio percibían en ella algo especial.

Cuando falleció se descubrieron los escritos de ella que había escrito por consejo del confesor pero nadie lo conocía. cuando se hace público aquel escrito, se empieza a descubrir y es un momento de mucha importancia porque a partir de ese momento muchas hermanas comienzan a dar sus testimonios de cómo la veían, de qué pensaban de ella. Y en ese momento además comienza un movimiento por parte de personas de fuera del monasterio que empiezan a hacer ver que habría que abrir el proceso de beatificación. “Realmente es una maestra de vida espiritual, ella vive el desposorio espiritual, vive grandes etapas en la vida mística, el matrimonio espiritual, ella dibujaba y no es que le interesara tanto el tema artístico sino el poder expresar toda la fuerza de lo que ella vivía.

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