El Papa pide a los periodistas que ofrezcan hechos y no “fake news”
(ACI) El Papa Francisco alentó a los periodistas a “garantizar que haya hechos en lugar de fake news, objetividad en lugar de habladurías, afán de precisión en lugar de títulos aproximados”.
En la audiencia que concedió a una delegación de periodistas católicos y evangélicos de la República Federal de Alemania este jueves 4 de abril en el Vaticano, el Santo Padre explicó que el diálogo “genera entendimiento, abre horizontes, y reencontrarse crea el espacio para un intercambio libre y abierto de información, opiniones y análisis”.
En su discurso, el Papa lamentó algunas de las lacras que afectan al mundo de hoy. Señaló que “desde hace tiempo somos testigos de una preocupante evolución en el mundo: la contestación del derecho a la vida, el avance de la eutanasia, la negación de la igualdad social, la falta de integración, la violación de la dignidad humana y de la libertad de conciencia”.
En este contexto, “compete a los medios de comunicación públicos la responsabilidad de asumir decididamente posición por el bien precioso de la libertad humana. Y las Iglesias os sostienen en este servicio, ya que se les confío la misión de Cristo, que vino entre los hombres ‘para que tengan vida y la tengan en abundancia’”.
Además, recordó a los periodistas presentes en la audiencia que “como periodistas, colocáis a las personas en el centro de vuestra atención, con la intención de dar vuestra aportación para que sus vidas sean y sigan siendo dignas de ser vividas”.
“Espero que en vuestros programas nunca falten las cosas buenas, las muchas buenas noticias que vale la pena contar y que dan esperanza”, concluyó.
Los 4 pecados de los periodistas
No es la primera vez que el Papa Francisco habla sobre la profesión periodística y la responsabilidad de los periodistas.
En la reciente entrevista que el Pontífice concedió al periodista español Jordi Évole del canal La Sexta, Francisco alertó sobre cuatro pecados o desviaciones en las que pueden caer los hombres de prensa y los medios de comunicación.
Esos pecados, o desviaciones, son la desinformación, la calumnia, la difamación y el amor a la cosa sucia.
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