Advocaciones marianas: Nuestra Señora de Lourdes
La advocación católica de nuestra señora de Lourdes hace referencia a las apariciones de la virgen María que Bernadette Soubirous presenció en la gruta de Masabielle, a orillas del rio grave de Pau, en las proximidades de los pirineos en el año 1858.
Bernadette era una niña de unos 14 años de una familia muy humilde de la región, siendo su padre el molinero y su madre la costurera del pueblo. Era prácticamente analfabeta y, en su infancia, había superado varias enfermedades de gravedad que a punto estuvieron de terminar con su vida puesto que era de condición delicada y sufrió asma y cólera.
Paseando por la pradera cercana a la gruta de Masabielle, Bernadette se encontró con una aparición que comenzó a hablarla en su propio dialecto del francés, el gascón, un derivado del occitano, y la conminó a encontrarse con ella en esa misma gruta todos los días durante quince días. Al preguntarle quien era, ella respondió “yo soy la Inmaculada concepción “, que traducido al dialecto francés-occitano es “que soy/era inmaculada councepción”.
Bernardita relato la aparición a sus paisanos y familiares cercanos y la mayoría demostraron su escepticismo e incluso algunos la tomaron por loca mientras que otros consideraron que solo quería hacer dinero dada la situación de pobreza en la que vivía. Sin embargo, un manantial de abundante agua comenzó a brotar de la gruta, 100000 litros comenzaron a manar desde allí a diario y de forma continuada. Al ver el manantial, muchas personas del pueblo empezaron a dar credibilidad a sus relatos y a dar pábulo a la aparición mariana cuya fama empezó a extenderse.
La niña fue sometida a varios interrogatorios por parte de autoridades eclesiásticas locales para comprobar la veracidad de su historia, durante los cuales permaneció impasible y en calma. Fue finalmente el obispo de Tarbes, ciudad cercana a Lourdes, el que aposto por ella, la apoyó y a raíz de eso publico una carta pastoral en la que manifestaba su credibilidad ante las apariciones declarando que “la Inmaculada madre de dios se ha aparecido a Bernadette”.
Los mensajes de la señora tomaron forma: pidió la construcción de una basílica en dicho lugar para que sus fieles fueran a rezar y los católicos a peregrinar. Su mensaje fue convertido en encíclica por el Papa Pio XII, de nombre “ fulgens corona”. De esta forma pasaron de ser revelaciones privadas a públicas y el papa Pio XII exhorto a los católicos a peregrinar allí enviando primero a su cardenal Pacelli para corroborar que existía el manantial y a que fuera venerada personalmente por él. En el año 1862, unos 17 años antes de la muerte de Bernadette, autorizó al obispo local para que permitiera la veneración de la virgen Maria en Lourdes.
Se construyó un santuario en dicho lugar, una iglesia y capilla a la que peregrinan alrededor de ocho millones de personas al año y una estatua de la virgen de Lourdes fue esculpida por el escultor Joseph Hughes Fabisch, profesor de la academia de las artes de Lyon y fue situada en la propia gruta para devoción de sus fieles, llamada a partir de entonces gruta de las apariciones.
La estatua consiste en una mujer de blanco con velo del mismo color con cinturón azul y manos extendidas en actitud oferente, de las cuales cuelga un rosario y a sus pies lleva dos rosas. Bernadette Soubirous fue proclamada santa por el Papa PíoX en el año 1933, habiendo sido previamente canonizada en el año 1932. Actualmente su cuerpo incorrupto permanece en una Iglesia de la ciudad de Nevers, donde puede visitarse. El santuario ha sido visitado por personajes ilustres entre los que destaco el Papa Juan Pablo II, que instauró la Jornada anual del enfermo y el arzobispo de Canterbury, que después de su visita escribió un articulo acerca de sus impresiones.
La historia de santa Bernardita o Bernadette o Bernarda y su contacto con la virgen en Lourdes ha sido representada en varias películas y series que narran la historia de su vida y relación con la divinidad, la mas famosa de ellas fue “La canción de Bernadette”, del director norteamericano Henry King; basada en la novela homónima del austriaco Franz Werfel, emitida primero en los EE. UU. y ganadora de cuatro Oscar y tres globos de oro.
Lourdes es la patrona de los enfermos ya que desde el propio evangelio la virgen acompaña a los seres humanos que más sufren, entre ellos Jesus. Su onomástica se celebra el 11 de febrero, fecha de su primera aparición y desde su creación se la atribuyen varios milagros. Se han creado alrededor de siete mil expedientes de curación, pero no todos son reconocidos como milagros; solo algunos que han de cumplir ciertas pautas como haberse producido de forma súbita, no poder ser demostrados científicamente o haber sido refrendados mediante testigos.
Millones de personas movidas por la fe acuden anualmente en peregrinación a la gruta, en su mayoría enfermos que esperan curarse por su intercesión.
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