Monseñor Hoser: “En Medjugorje no me ocuparé de los videntes”
(Fundación Centro Medjujorge) “No conozco el motivo por el que me han nombrado a mí. Les estoy muy agradecido. El encargo no me asusta. Los frutos espirituales de Medjugorje son buenos.” Lo dice en esta entrevista a La Fede Quotidiana monseñor Henryk Hoser, polaco, arzobispo de la diócesis de Varsovia-Praga, nombrado recientemente enviado especial del Papa para los aspectos pastorales en Medjugorje.
Excelencia, ¿se esperaba este encargo?
“No, y no conozco el motivo por el que el Papa me ha nombrado. Obviamente le estoy agradecido, lo desarrollaré con todo mi compromiso, pero no me asusta”.
Usted es un obispo conservador…
“Yo no me defino así. Más bien soy un hombre de Iglesia que busca ser fiel a la Palabra, a la Doctrina, a la Tradición, obviamente a todos los documentos. Si esto quiere decir conservador, entonces soy conservador”.
Polonia, de la que es usted hijo, generalmente alberga sentimientos positivos hacia Medjugorje…
“En efecto, responde a la verdad. Los católicos de esta nación, que es profundamente mariana, generalmente tienen una idea positiva de Medjugorje. Y va mucha gente. De otras naciones, cada año llegan a Medjugorje 2.000.000 de peregrinos, y esto significa algo. De todas formas, yo no me ocuparé de los aspectos teológicos o de las apariciones, sino que lo hará la Comisión Pontificia. Mi cometido es la pastoral”.
¿Los videntes?
“Para mí no son ni un problema, ni el problema. Le repito que no forman parte de mi cometido”.
Juan Pablo II, a quien usted conocía bien, albergaba buenos sentimientos hacia Medjugorje…
“Él era realmente muy devoto de la Virgen, incluida la de Medjugorje. No es una cosa negativa”.
La Virgen de Medjugorje es la Reina de la Paz, pero también de la Familia que usted como Obispo defiende de forma decidida…
“Es cierto. Es muy importante invocar a María para la protección de la familia, formada por un hombre y una mujer unidos por el sacramento del matrimonio. En las apariciones de Medjugorje encontramos el Rosario en el centro, la adoración eucarística, el ayuno, la penitencia, todo son cosas positivas para la vida y que incentivan y animan al desarrollo de la fe”.
¿Cuáles son los frutos de Medjugorje?
“Como le decía, yo me limito a la pastoral y no a la doctrina, por tanto no al tema de la veracidad. Con respecto a los frutos en las almas, me parecen positivos. Por frutos entiendo la práctica de los sacramentos, las conversiones, el cambio de vida, la participación en la Misa y esto es lo que sucede en Medjugorje…, no podemos negarlo ni prescindir de ello pastoralmente”.
Últimamente ha estado usted gravemente enfermo. ¿Es verdad que le ha rezado también a la Virgen de Medjugorje?
“Contraje la malaria en África. Le he rezado a la Virgen, yo creo en María en todas sus manifestaciones”.
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